IMAGEN SUPERLATIVA: ANDRE KERTÉSZ

 

Detalles de realización técnica

Esta fotografía ha sido realizada mediante la ubicación de la modelo, bien como del fotógrafo, frente a un espejo distorsionado. Andre Kertesz, como se ve en la misma imagen, utilizaba sobre trípode su cámara de formato medio, probablemente una Goerz Tenax o su ICA box según una rápida pesquisa respecto del arsenal utilizado por el austrohúngaro. Lógicamente se ha utilizado soporte analógico de formato medio, monocromático.

Justamente por la naturaleza de la distorsión, que "estira" los sujetos generando una especie de barrido de poca nitidez, bien como la distorsión natural de los tamaños y distancias, resulta complicado especificar una velocidad de obturación y abertura de diafragma aproximados. Sin embargo, sabiendo que la cámara estaba sobre trípode y analizando los segmentos menos deformados de la imagen, que aún se ven algo borrosos, calculo que utilizó una velocidad no muy alta, seguramente una en la que no podría obtener el mismo resultado con la cámara en mano. Quizás algo entre 1/15 y 1/60. En cuanto al diafragma, también resulta complicado entender donde la poca nitidez tiene que ver con el efecto de distorsión y no con la profundidad de campo, por lo que los indicios confunden. Aún así, noto que en las partes menos distorcionadas hay una variación de nitidez importante, y ni hablar de las partes distorcionadas que aparentan estar más "cercanas", por lo que calculo que no tenía el diafragma cerrado, buscando una nitidez general. Probablemente lo tenía relativamente abierto, quizás en un f5.6 o un f8, siguiendo el manual del fotógrafo callejero, o un punto menos. Realmente es difícil afirmar en el caso de esta imagen.

En cuanto al objetivo utilizado, nuevamente la distorción confunde y juega en contra. Pero es claro que no ha utilizado un teleobjetivo, ya que se pueden apreciar las profundidades y distancias entre los planos. Diría que ha utilizado algo entre la frontera de un gran angular y un normal, quizás un 35mm o algo aún más angular. 

En cuanto a la puesta de luces, nuevamente es difícil afirmar, pero observando como la luz les da a la modelo bien como al mismo fotógrafo, y su direccionalidad parece ser bastante frontal, diría que la luz proviene de "atrás del espejo", es decir, de frente a Kertesz, por ejemplo. Y solo de ese lado, diría, ya que el fondo de los modelos parece totalmente oscurecido. También por como va "oscureciendo", en la pared al lado del fotógrafo por ejemplo, se asemeja mucho a como se va difuminando de apoco la luz natural. Pienso que podría haber un ventanal, detrás del espejo fotografiado, lo suficientemente amplio como para ceder paso a la luz natural, que no se veía muy dura sino tenue.

Así, Kertesz probablemente ubicó a la modelo sentada ante el espejo, direccionando su cabeza hacía la parte mas cóncava, la zona óptima de distorsión, y después de algún movimiento encontró su spot ideal, en el que la distorción conectaba las figuras multiplicadas por la cabeza y por las piernas. PAreciera ser que fue ensayada y buscada la pose, y no una obra de hacer que la modelo se mueva y fotografiar la distorsión hasta accidentalmente caer en esa composición en una suerte de instante decisivo. 

Detalles espacio-temporales

Esta fotografía, se sabe, ha sido realizada en Francia en el año 1933, y forma parte de una serie de fotografías que realizo Kertész utilizando los espejos distorsionados y modelos desnudas. Claramente estamos hablando del período entre-guerras en Europa, en la que crecía una juventud traumatizada por el fantasma de una guerra, confundida, perdida con el estado actual de las cosas y la incertidumbre.  Distintas reespuestas de distintas naturalezas a ese contexto, todas vinculadas a un deseo de ruptura con el pasado y propuesta de una nueva manera de observar, absorver, pensar y hacer vendrían a ser representadas por los movimientos artísticos de vanguardia. Entre ellos el surrealismo, que propone la libertad absoluta de creacción, heredero del dadaísmo, y se basa en una idea de "libre asociación", casi freudiana, vinculada a un plano onírico, donde el sentido es difuso. No se busca un mensaje claro con esas composiciones libres, sino casi que lo opuesto, se cuestiona la necesidad de un mensaje y un discurso, bien como la autonomía del arte, a la vez que se hace uso de ella. Entonces siempre se tiende a la experimentación, al "paso mas allá" de cada medio artístico, en un rechazo a las formas tradicionales de expresión de aquellos. En ese sentido, se puede ver como Kertesz, inmerso en ese contexto - particularmente Francia fue el país expoente del surrealismo - se vio influenciado, no necesariamente de manera consciente por ese aire de experimentación libre, de relativización del sentido, de asociación a lo onírico, jugando con imágenes casi arquetípicas. En ese caso experimentando con el medio  a través de la distorsión construye su universo figurativo proprio; relativiza una figura que se parece a un cuerpo femenino pero parece irse a otro lado.

Tipo de Imagen

Se trata, claramente, de una fotografía de naturaleza artística, de vanguardia, experimental. Más precisamente, un retrato. Aunque también un autorretrato, a la vez; Me interpela esta particularmente por esto: es la única fotografía de la serie de distorsiones en la que Kertesz decidió incluirse en cuadro, enunciando así el dispositivo fotográfico y la instancia de enunciación, reforzando aún más su relativización de la representación tradicional - característica típicamente vanguardista. Entonces hay margen para afirmar que se trata de un retrato de la modelo, pero también hay margen para decir que es un autorretrato del autor. Podría decirse que es un retrato del mismo dispositivo, es la foto de alguien que le toma la foto a alguien que se ve distorsionado por el objeto al cual se le apunta la cámara. Creo que la misma foto se pregunta por su misma naturaleza.

En el caso de no tener conocimiento previo, se podría llegar a deducir el nombre del autor sólo porque se ve en cuadro y es uno de los mayores fotógrafos de la historia, pero mediante una pesquisa. El espectador desavisado no tendría porque saberlo. Aún así, está presente esa búsqueda característica de Kertesz por composiciones inovadoras, la indagación morfológica de los cuerpos, sombras y luces, manos, cabezas, partes que de alguna manera conversen entre sí y terminen formando una composición holística, un sistema que funciona por si solo, con dinamismos y jerarquías de figuras. Es interesante ver como acá la búsqueda fue deliberadamente por ese lado, y la imagen se ha creado de cero, cuando esas características en la obra anterior de Kertesz se veían en su trabajo callejero, donde no tenía el control absoluto de las partes.

Es una imagen que configura parte de una serie muy importante en la obra de Kertesz, las distorsiones, juntamente a su trabajo callejero y de fotografías desde ventanas, conforman sus trabajos más reconcidos. Sin embargo, esta fotografía específica es de las menos aclamadas de la serie, quizás por tener la - hermosa - anomalía que es la figura del fotógrafo en cuadro. 

Significado y desglose conceptual de la imagen

Como ya dicho anteriormente, en esta foto tenemos una búsqueda deliberada por la relativización de una manera de representar un cuerpo; Lo que salta a la vista es el cuerpo femenino desnudo distorsionado, sin rostro, multiplicado, enrarecido, haciendo hincapié el shock y el vínculo esencial a una dimensión onírica, en ese caso reforzada por el uso de una imagen arquetípica (la mujer desnuda, la "musa", etc). Es decir, de por si es una imagen de naturaleza surrealista que pretende abstraer lo figurativo, como son las demás de esta serie. 

Sin embargo, esta tiene el paso mas allá: el diferencial de la autoconciencia, la enunciación del dispositivo, que me parece una decisión espectacular porque explicita al espectador todo lo mencionado en el párrafo anterior, es un retrato de la búsqueda por un retrato surrealista, documenta un proceso a la vez que entrega el producto. La fotografía incorpora su subjetividad al resultado final, lo que a la vez funciona como ese documento, registro de un proceso artístico, conforma también el arte cuyo proceso documenta. Además, refuerza el sentido vanguardista de la serie en el sentido que delata la completa conciencia del arte como algo subjetivo, de valoración subjetiva, donde las maneras de representar que se claman como "naturalistas" o "objetivas" son tan solo maneras de representar al fin y al cabo, y que no hay límites para la experimentación con distintas maneras de representar. Son todas representaciones, y no existen las reglas, y es como si Kertesz, al incluirse en cuadro te dijera "Yo todo eso lo sé, entonces voy a hacer lo que quiera". En ese sentido me parece superlativa la imagen, para no decir imprescindible a cualquiera que tenga interés no sobre fotografía sino sobre maneras de representar, es decir el arte como un todo. Pienso que es una imagen universal porque no es necesario conocer los pormenores de todo sobre lo que me extendí acá entre tantas vueltas para que a uno le interpele; Eso se siente, antes de entenderse. Tampoco se limita a un contexto de comprensión específico, cualquier espectador puede apreciarla.

Siento que lo que retrata la foto no es ni a la modelo, ni a sus dos clones anómalos, ni al fotógrafo a la derecha. Se trata de una fotografía de la misma fotografía como medio, de todas sus posibilidades, de la curiosidad artística en si.